DIECINUEVE MENTIRAS SOBRE JUANA DE ARCO

Desmontamos los embustes, mitos e imprecisiones más populares sobre la joven francesa que dirigió las tropas francesas y se convirtió en un icono en todo el mundo.

Juana de Arco es un nombre famoso en el mundo entero. Se la considera mártir en la Iglesia católica, heroína nacional en Francia y fuente de inspiración frente a la adversidad en la mente de cualquiera. Su historia de heroísmo y sacrificio ha transcendido el tiempo y ha pasado a convertida en leyenda. El relato de la adolescente que derrotá al ejército británico en la Guerra de los Cien Anos y que fue luego acusada de brujería y sentenciada a morir en la hoguera por la Inquisición se ha contado hasta la saciedad. (Pero qué hay de cierto en toda la historia?

Es cierto que murió en la pira, pero no como bruja y no por culpa de la Inquisición. Tampoco ganó la Guerra de los Cien Aftos y, ya que estamos, ni siquiera fue una joven  rebelde. La imagen de la feroz guerrera vestida de hombre que hoy tenemos de ella es la que utilizaron  sus enernigos para lograr su ejecución.

Es normal que, con el paso del tiempo, surjan falsos mitos alrededor de las figuras históricas y se tergiversen los acontecimientos de su vida. En el caso de Juana, es irnpresionante el número de mentiras aunque hay pruebas irrefutables de su falsedad. Irónicamente, fueron los escribanos de los juidos, que trataron de erradicar su figura de la faz de la Tierra, quienes nos han proporcionado datos sobre esa mujer que vivió en el siglo XV. Sus transcripciones nos dan una imagen muy distinta de Juana: una joven piadosa de voz suave, que lloraba por sus enernigos y que deseaba regresar a su tranquila granja, con su farnilia Esta estampa de una muchacha que nunca fue agresiva, pero que mostró un gran valor ante el miedo y la adversidad, es probablemente mucho más irnpresionante que la de la diosa guerrera que tantas veces nos han mostrado. Aquí desmentimos los mitos y mostramos a la verdadera heroína.

1. Su ejecución fue un montaje

En 1436, cinco años después de que Juana fuera ejecutada en la hoguera, apareció una extraña figura, que nadie sabia de donde provenia. Su supuesta identidad llamó la atención de toda Francia, pues aseguraba ser Juana de Arco, que había escapado a sua ejecución. Había habido antes muchas mujeres que se hicieron pasar por Juana, pero esta mujer se parecia muchisimo a la joven guerrera. Además, los hermanos de la heroína, Jean y Pierre, fueron con ella y declararon que su historia era veridica. Esta "Juana" asseguraba que se habia escapado de sus captores y que habia vivido en la clandestinidad durante años. La historia se difundió por el pais y los tres recorrieron toda Francia, donde les recibían con regalos. Llegaron incluso a a los viejos camaradas de Juana que creían que habían perdido su amiga cinco años antes.

El embuste se descubrió em 1440, durante una visita al rey Carlos VII el hombre al que Juana había ayudado a subir al trono en 1429. El rey le pidió a Juana que le contase el secreto que le había confesado muchos anõs antes, pero la mujer fue incapaz de contestar y admitió el engaño, revelando que en realidad se llamaba Jeanne des Armoises.

La idea de que Juana había escapado de la hoguera es impensable ya que muchísima gente fue testigo de sua muerte. Los ingleses temían que la gente creyese que se habia escapado, por lo que obligaron al verdugo a apagar el fuego en plena ejecución para que todo el mundo pudiera ver su cadáver calcinado.

2. Juana era feminista

Las razones por la que se la considera una feminista de hoy en día son obvias: una joven que deja la casa familiar para dirigir un ejército de hombres durante uno de los conflictos más graves del momento en Europa. Sin embargo, si se piensa un poco, Juana es más bien todo lo contrario a una feminista. No es que le gustara desobedecer a la autoridad y que blandiera su espada contra la injusticia, no. En realidad lo que le interesaba eran pasatiempos tradícionalmente femeninos: coser, tejer y limpiar. De lo que más se enorgullecía no era de su habilidad para dirigir a hombres, sino de que era mejor que ninguna otra con la aguja y el hilo. Cuando le preguntaron directamente por qué no realizaba «las labores propias de su sexo», simplemente respondió que ya había otras mujeres haciéndolas. También se sabe que odiaba a las mujeres que rondaban los campamentos, y que las echaba con la espada, algo no muy propio de alguien que abogara por los derechos de la mujer. La misión de Juana consistia en ayudar a un hombre a ocupar el trono de Francia, y no permitia que otras mujeres se les unieran en su lucha, solo hombres. Más que sacudir los cimientos de los roles asignados a cada género, reforzó la idea de que solo los hombres, y no las mujeres, deberían acceder a puestos de poder.

3. Era una rebelde

A lo largo de la historia, se ha comparado a muchas adolescentes rebeldes con Juana de Arco, a la que se ha mostrado como una inconformista que desobedeció a sus padres para liderar ejércitos. En realidad era todo lo contrario: una muchacha piadosa, tranquila, diligente y dedicada a su família; una joven cuyo mayor acto de rebeldía consistió en escaparse de nifia a visitar las iglesias locales sin permiso paterno. Aceptó su misión con cierto reparo y siempre estaba lamentándose de las ganas que tenía de volver a casa con sus padres. La mayor prueba de su candor es que durante su juicio el fiscal intentó acusarla de tener una personalidad subversiva y no pudo encontrar ni una sola prueba que lo corroborase.

4. La Iglesia Católica la queria muerta

La idea de que fue una víctima de la Iglesia católica por ser protestante o bruja es completamente absurda. No sólo no hay ni una sola prueba de que efectuara algún tipo de práctica de hechicería, sino que en su juicio quedó muy claro que además de sentir un profundo desprecio por los ritos paganos, ni siquiera sabía muy bien en qué consistían. Igual de absurdo resulta pensar que fuera protestante, cuando llegó incluso a amenazar con organizar una cruzada contra los husitas si no se convertían al catolicismo. Los católicos que se hallaban presentes en su juicio no cumplían una misión religiosa, sino que obedecian a sus alianzas con los ingleses. La mayoría del clero apoyaba a Juana, a la que consideraban una buena católica desde antes de empezar su campana.

5. Era una gran estratega militar

Juana, una ingenua campesina de 17 años, demostró un gran valor al sumarse a los soldados y atacar en la batalla, pera no era un genio militar. De hecho, sus precipitadas acciones a menudo pusieron en peligro al ejército francés. Por ejemplo, cuando llegó a Orleans, insistió en que había que atacar a los ingleses desde el norte, que era donde más tropas tenian. Los mandos estaban en contra de esa estrategia. que consideraban muy peligrosa, y para evitarla siguieron una ruta distinta sin decírselo a Juana. Durante el ataque, Juana estaba echando una cabezada y se perdió casi toda la batalla. Cuando la joven actuó según su propio criterio y asaltó por su cuenta la fortaleza de Les Tourelles, salió bien librada de milagro ya que tuvieron que sacarla de un campo de batalla en el que reinaba el pánico. Le pidieron que no siguiera con el ataque al día siguiente. algo que ella ignoró.

6. Preferia ir vestida con ropa de hombre

La idea de que Juana de Arco se quitaba la falda y la cambiaba por pantalones y armadura a la menor oportunidad está muy extendida, y fue de hecho por vestir rapa de hombre por lo que al final la ejecutaron. Pera no lo haáa por gusto, sino por necesidad. Primero para poder cabalgar con facilidad, y luego para protegerse de los muchos intentos de violacián que sufriá. No solo a Juana le gustaba ir vestida de mujer antes de empezar su misión, sino que pidiá que la enterraran con un vestido si moría en la cárcel.

7. Los franceses se enfurecieron por su ejecución

Hoy a Juana los franceses la tienen como heroína nacional, pera en su dia hubo más franceses celebrando su ejecucián que llorando su pérdida. Los que apoyaban a Juana y al rey Carlos VII tal vez se entristecieran, pera no hubo ni misas, ni funerales; la corte guardá un silencio sepulcral respecto a su muerte. Le llevá años a Francia revocar la sentencia de Juana y aceptarla como la figura que es hoy en dia. Tras declararse su inocencia. no empezaron a considerada una leyenda hasta cuatro siglas después. Napoleán la utilizá como símbolo a principias del sigla XIX.

8. La victoria de Francia en la Guerra de los Cien Años se debe a Juana

Aunque no se puede negar que la presencia de Juana ayudó en el sitio de Orleans, y que este llevó a la coronación de Carlos VII, seria erróneo atribuirle la victoria final. Además de ser ejecutada 20 anõs antes de la ultima batalla, la de Castillon, hubo otros muchos factores que influyeron en la victoria. El periodo de la guerra fue un tiempo de transición en el que Francia pasó de ser um estado feudal a una nación moderna con su ejercito profesional. Los largos periodos entre conflictos permitieron al ejercito franc~es reunir tropas hasta hacerse con un ejercito valiente y bién organizado. Los ingleses, además de tener problemas financieros, se centraron en la Guerra de las Dos Rosas y la campaña francesa quedó en segundo plano. Si bien es cierto que Juana estimulaba el nacionalismo en un ejercito abatido, el conflicto fue demasiado compleko como para atribuir la victoria a la labor de esta mujer.

9. No era muy inteligente

La mismísima Juana deóa que ella no "era nada dei otro mundo", pero eso no significa que fuera estúpida. Cuando leemos las transcriciónes de su juicio nos encontramos con una mujer de mente muy ágil. Por ejemplo, cuando un hombre de acento muy fuerte le preguntó que en qué lengua le hablaban las voces que oía en su cabeza, ella contestá que hablaban mucho mejor que él. También hay que tener en cuenta que fue capaz de convencer nq solo a Carlos VII, sino también a los oficiales de alto rango, de que le dejaran un sitio ai mando dei ejército.

10. El duque de Bedford era malvado

El tercer hijo del rey Enrique IV de Inglaterra, Juan de Lancaster, fue regente de Inglaterra hasta la mayoria de edad de su sobriño. el rey Enrique VI. Como sus acciones llevaron a la captura y ejecución de Juana de Arco, en los anales de la Historia aparece como si hubiera sido un hombre malvado, lo que nos es justo. Además de un gran estratega militar, mostraba un gran valor en la batalla. Yo no solo eso, a diferencia de otros insensatos lideres, era un dirigente amable y misericordioso. Dada la época en la que le tocó vivir, fue contenido y muy empático, de gran lealtad a su causa y a su família.

11. Era raro que una mujer liderara un ejército

Lo único que tiene de raro que Juana liderara un ejérdto es su origen social. Era una práctica bastante común entre damas de la aristocracia comandar las tropas familiares en ausencia de un hermano o dei marido. Y más que ser una medida de rebelión social era una forma de obedecer a la sociedad feudal francesa. Juana obtuvo el mando por vivir en una sodedad religiosa que creia que cualquiera podia recibir instrucciones de Dios. Resulta poco probable que un ejército de hombres la hubiera hecho caso si no hubiera sido porque la inclusión de mujeres en la batalla era ya un hecho aceptado.

12. Fue canonizada muy rápido tras su ejecución

Está muy extendida la creencia errónea de que Juana fue hecha santa tras morir en la hoguera. De hecho, pasaron 25 afios hasta que hubo un nuevo juicio sobre el caso, en 1456, tras una investigación que se llevó a cabo en 1452 y un recurso de apelación que se presentó formalmente en 1455. Fue supervisado por el papa Calixto III a petición de la madre de Juana y dei inquisidor Jean Brehal. El juicio contó con el testimonio de más de 115 personas y concluyó que Juana había sido inocente de los delitos que se le habían imputado. AI principio se le había acusado de 70 crímenes, que quedaron reducidos a 12, y que iban desde la brujeria hasta el robo de caballos. AI final la ejecutaron por dos: herejía y travestismo. No fue. canonizada hasta el 16 de mayo de 1920 por el papa Benedicto XV, casi 500 años después de su muerte.

13. Carlos de Orleans fue su padre

Este mito es uno de los más antiguos y províene de la creencia de que alguien de extracción tan humilde no podía haber realizado tan grandes hazaftas. En 1407 nació un bebê en la familia de Orleans que murió al poco tiempo, así que la gente se precipitá a creer que Juana probablemente fuera ese bebê "perdido", al que habían escondido y educado para ser la figura que dirigiria a Francia a la victoria.Esta absurda teoría ignora que el bebê murió y que así consta en los registros. Además nació cinco afios antes que Juana. No existe ninguna prueba que pueda corroborar esta teoria, y es ridículo que los logros de Juana queden legitimados por tener sangre real. De hecho, durante esa época muchos miembros de la familia real francesa sufrian enfermedades y trastornos mentales.

14. Fue una gran guerrera

Aunque «la doncella de Orleans» sea recordada como una gran guerrera, ella misma reconoció en el juicio que nunca había matado a nadie. De hecho, probablemente fuera una de las figuras más apacibles dei carnpamento. Sus camaradas decian que andaba siempre llorando y rezando por las almas de las hajas de ambos bandos. Juana desempeftó más el papel de una especie de "mascota" dei ejército que de combatiente. A pesar de llevar una espada, confiaba mucho más en su estandarte, proclamando que de gustaba más, mucho más, hasta cuarenta veces más su estandarte que su espada». La imagen de Juana en el campo de batalla blandiendo su espada no es autêntica, pero sí que es cierto que fue muy valiente: en el asedio de Orleans fue herida con una flecha en la clavícula y sin embargo siguió en el campo de batalla animando a las tropas francesas.

15. Mintió acerca de las voces que oía

La presenda de tres misteriosas voces en la cabeza de Juana la enviaron a recorrer Francia !levando a cabo su misión de expulsar a los ingleses. La acusación de que Juana mentia cuando hablaba de estas voces estaba tan extendida que así ha llegado hasta nuestros días. En el juicio la cuestionaron repetidas veces sobre las voces, sobre lo que!e pedían y sobre la naturaleza de sus apariciones. Si tenemos en cuenta que Juana se defendia a sí misma y que estaba agotada física y mentalmente. habría sido normal que su histeria hubiera cambiado de una vez a otra, pero no fue así. Sufrió un constante interrogatorio y ella siempre repetía las mismas respuestas. Juana tuvo su primera visión a los 12 años. las voces de su cabeza!e ordenaron que echara a los ingleses del país y que llevara al delfín Carlos VII a Reims para que fuera coronado. Hasta los 16 años no se sintió obligada a obedecerias. No es muy probable que se inventara la historia de las tres voces para llamar la atención, pues se habría venido abajo en un interrogatorio de ese tipo. Si las voces provenían de santos o ángeles. como ella creía, es imposible de demostrar, pero lo que sí podemos afirmar es que Juana estaba convencida de que las voces que!e hablaban eran legítimas, y que las obedecia aun a riesgo de ponerse ella misma en peligro.

16. La Inquisición organizó el juicio

Mucha gente cree que la Inquisición fue la responsable de!juicio y ejecución de Juana, pero eso no es cierto. Pierre Cauchon sirvió de juez , pero no forrnaba parte de la Inquisición. Lo cierto es que el único inquisidor que hubo fue Jean le Maistre, quien realmente no estuvo presente en e!juicio pero aun así se vio obligado a presidido. No se atrevió a negarse por las amenazas de muerte que recibió de los ingleses. Cuando el caso fue reabierto casi 20 años después, el inquisidor Jean Brehal estuvo de acuerdo con Le Maistre en que e!juicio y la sentencia habían sido ilegales. Los que en su dia habían protestado sobre la legalidad de todo e!asunto habían acabado con sus huesos en la cárcel o amenazados de muerte por los ingleses, y los inquisidores no estaban exentos de esa suerte. E! juicio de Juana y su ejecución fueron una estrategia política. El proceso estuvo controlado por los ingleses que querían privar a Francia de esa peligrosa mujer que amenazaba su victoria.


17. No hay ninguna evidencia de que Juana fuera homosexual. Este "crimen" fue otra falsa acusación para juzgarla.

18. Juana no pudo ser la díestra amazona que se nos ha presentado, pues aprendió a montar mientras llevaba a cabo su misión. En la batalla iba con los jinetes más lentos

19. Las supuestas reliquias de Juana de Arco en realidad eran restos de una momia egipcia.


Texto publicado en "Vive la Historia", n.13, Febrero, 2015, pp. 86-93  Adaptación y ilustración para publicación en ese sitio por Leopoldo Costa.